El atentado en Ankara, que es inhumano y hostil contra toda la gente, es otro indicio de cómo nuestro país ha sido llevado a la catástrofe. [EN]
Condenamos el ataque en Kızılay, donde mucha gente se murió y cientas de personas resultaron heridas.
Condenamos el ataque en Kızılay, donde muchas personas han muerto y hay cientos de heridos.
El ataque de Ankara debe considerarse inhumano y hostil contra toda la gente. La identidad de los atacantes no importa ya. Es el Gobierno del AKP quien ha convertido el país en un escenario de violencia ciega debido a sus sangrientas aventuras no sólo en Turquía, sino en toda la región.
Es obvio que Erdogan y su gobierno sólo podrían llevar a Turquía a la catástrofe. Todos los funcionarios públicos y burócratas del gobierno deben saber que cualquier práctica que sirve para continuar esta catástrofe supondrá responsabilidades, y que deben comportarse en consecuencia, abandonado a esta banda de criminales.
Nuestro pueblo debe exigir inmediatamente la dimisión del Gobierno y no debe buscar la solución en el imperialismo norteamericano, en los golpes militares, en las operaciones de Cemaat o en los escenarios de guerra civil, étnica o sectaria.
Nuestras condolencias a Turquía y a la humanidad.